Las condiciones climáticas estivales en las diferentes cuencas lecheras pampeanas, en particular en la central, se alejan en gran medida de la zona de confort térmico del rodeo bovino y afectan su eficiencia productiva y reproductiva.
Con el fin de brindar herramientas que den respuestas a esta problemática, cuatro instituciones (INTA Clima y Agua, INTA Rafaela, FCA-UNL y el Servicio Meteorológico Nacional) elaboran semanalmente un índice de temperatura y humedad (ITH) y suministran consejos y sugerencias para prevenir y minimizar el estrés calórico.
Bajo condiciones de estrés térmico, la producción de leche puede verse afectada por una menor disponibilidad de energía. Además de herramientas para atenuar los efectos del calor, es importante evaluar dietas frías para reducir el déficit energético. Algunas recomendaciones son:
- Tener sistemas de refrescado, establos con sombra y ventilación.
- Proporcionar agua limpia y fresca a voluntad.
- En caso de contar con patios de comidas, suministrar la ración completamente mezclada (TRM) preferentemente entre las 5 y las 6 de la mañana y al anochecer.
- Preparar la ración lo más cerca posible del momento de suministro, especialmente para vacas en lactancia temprana o en lotes de vacas de alta producción.
- Como fibra, es aconsejable utilizar forrajes húmedos como los silajes para mejorar la palatabilidad de la ración.
- La suplementación con lípidos resulta útil: suele inhibir la síntesis de novo de grasa láctea en glándula mamaria, lo que implica un ahorro de energía y de glucosa que serán destinadas a mantener el volumen de leche.
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